Problema: tirones por debajo de las 3000rpm
Publicado: Sab Jul 28, 2007 2:58 am
Como ya sabéis, tengo mi saab de baja temporal desde 2002 a la espera de volver a ponerlo en circulación cuando llegue el momento. Mientras tanto me dedico a moverlo de vez en cuando y a hacerle el mantenimiento para que el coche esté en forma.
Hoy ha tocado paseo y cambio de aceite y líquido de refrigeración… y he tenido mi primer problema con el coche desde hace 5 años. No creo que sea nada grave, pero prefiero consultároslo para que me deis vuestra opinión.
La mañana se las prometía feliz, pero ya empezamos mal cuando al entrar en el coche observo que el interior está lleno de manchas de moho. Nunca me había pasado, pero al menos es un mal menor que se soluciona con una simple limpieza con un paño.
Conecto la batería y el coche arranca sin problemas a pesar de llevar 5 meses parado.
Voy directo al taller y una vez allí al abrir el capó me percato de la presencia de indicios de okupas en el aislamiento del motor (un par de agujeros con pelusa sobresaliendo y lluvia de mini-cagallones al sacudir la manta). Una panda de ratones-g***** habían estado viviendo allí sin permiso. Menos mal que no atacaron a cables ni tubos, me digo.
El mecánico comienza a resoplar mientras observa los bajos del coche, “esto vai ser moi complicado” repite varias veces refiriéndose al vaciado del circuito de refrigeración. Luego discute con un compañero sobre por donde vaciar el carter del aceite, que si será esta tuerca que si será esta otra. Me preguntan si el aceite es compartido por la caja de cambios, y yo que no me acuerdo aunque pienso que no… en estas tesituras, temiendome lo peor, le pego un toque a Rubén pero no contesta. Parece que los mecánicos se aclaran con el tema. BIP! Mensaje de Rubén que está trabajando preguntándome en que me puede ayudar. Asunto arreglado le contesto agradecido.
Una hora más tarde salgo del taller con mi nuevo aceite 10-40 directo a la ducha, para dar una pasada con agua a presion a carrocería y bajos. La rutina de siempre.
Y tras el baño, llega el momento esperado: mi 900 y yo a solas. Arranco y me sumerjo en 20 km de satisfacciones. El coche va fenomenal, suave y tira de lo lindo a pesar de que la aguja del turbo no pasa de la mitad de la zona naranja. Este problema ya lo tenía antes de darlo de baja y al parecer está causado o por una pérdida en el colector de admisión, o por el sensor de presión del turbo, que es lo más probable según me dijo el mecánico de la saab de Ourense.
Mis paseos con el 900 son tranquilos tirando a alegres, pero no me corto de ponerlo a 120km/h o más (bastante más) por esas largas y rectas pistas por las que prácticamente no me cruzo con nadie. Y una vez el motor coge la temperatura adecuada, me gusta darle algún que otro estirón hasta la zona roja del cuentarrevoluciones, por placer y creyendo que no le va a ir mal al motor que lo desagarrote un poco.
Hoy tras dos o tres buenas esprimidas decidí dar por terminado el paseo, así que antes de dirigirme de vuelta a la palleira quise enfriar un poco el motor con un par de kms tranquilos por las rectas por donde se accede a la aldea. Ida y vuelta. El km de ida bien, pero a la vuelta comenzaron los problemas. Tras detenerme y dar media vuelta comencé a notar unos tirones al acelerar, una sensación similar a cuando se te acaba la gasolina, así que lo primero que hice fue echarle el ojo a la aguja que estaba casi abajo del todo aunque no se había llegado a encender el chivato luminoso (Llegados a este punto debo reconocer que ya no recuerdo si el 900 tiene chivato luminoso...).
Después comprobé la aguja de la temperatura pero marcaba lo normal: la zona roja… jeje es broma.
Temeroso de quedarme tirado como en los viejos tiempos, llegué a punta de gas y a tirones a mi destino. Una vez allí comprobé que el ralentí era un poco irregular, aunque no se notaba en exceso, además el coche para nada hacía amago de pararse.
Sintiéndome más seguro decidí volver a la carretera para estudiar con más detenimiento los síntomas, y me di cuenta de que los tirones desaparecían a partir de las 3000rpm. A partir de ahí el coche parecía andar normal. Me atreví a hacerle una estirada más hasta la zona roja. Me fijé en que la aguja del turbo se quedaba un poco más abajo que unos minutos atrás y el tirón quizá no fuera tan contundente. Pero al bajar de las 3000rpm volvieron a aparecer los tirones así que resignado regresé a la guarida.
Y ya ta.
Bueno, como os he contado un rollo haré un resumen breve de lo acontecido:
1. Coche arranca e inicio la marcha, todo en orden.
2. En el taller cambio de aceite y refrigerante, salgo de allí y todo ok.
3. Lavado de coche y bajos con agua a presión, salgo de allí y todo ok.
4. 15 o 20 km de marcha incluidas varias estiradas sobre todo al final del trayecto, todo ok.
5. Fase de enfriamiento del motor antes de volver a guardarlo: comienzan los problemas al cabo de aprox.1 km de rodar tranquilo.
6. El coche va como a trompicones por debajo de las 3000rpm.
7. Por encima de las 3000rmp todo parece en orden, quizá algo menos de empuje.
8. Aguja de temperatura normal. Presión del turbo no pasa de 1/3 de la zona naranja al meterle caña a tope.
9. SNIF!
¿Se habrán ensuciado los inyectores por llevar el nivel de la gasolina bajo? Pero esto debería afectar a toda la gama de revoluciones ¿no?
A ver si alguien me puede dar su opinión, gracias de antemano.
Un saabludo.
Hoy ha tocado paseo y cambio de aceite y líquido de refrigeración… y he tenido mi primer problema con el coche desde hace 5 años. No creo que sea nada grave, pero prefiero consultároslo para que me deis vuestra opinión.
La mañana se las prometía feliz, pero ya empezamos mal cuando al entrar en el coche observo que el interior está lleno de manchas de moho. Nunca me había pasado, pero al menos es un mal menor que se soluciona con una simple limpieza con un paño.
Conecto la batería y el coche arranca sin problemas a pesar de llevar 5 meses parado.
Voy directo al taller y una vez allí al abrir el capó me percato de la presencia de indicios de okupas en el aislamiento del motor (un par de agujeros con pelusa sobresaliendo y lluvia de mini-cagallones al sacudir la manta). Una panda de ratones-g***** habían estado viviendo allí sin permiso. Menos mal que no atacaron a cables ni tubos, me digo.
El mecánico comienza a resoplar mientras observa los bajos del coche, “esto vai ser moi complicado” repite varias veces refiriéndose al vaciado del circuito de refrigeración. Luego discute con un compañero sobre por donde vaciar el carter del aceite, que si será esta tuerca que si será esta otra. Me preguntan si el aceite es compartido por la caja de cambios, y yo que no me acuerdo aunque pienso que no… en estas tesituras, temiendome lo peor, le pego un toque a Rubén pero no contesta. Parece que los mecánicos se aclaran con el tema. BIP! Mensaje de Rubén que está trabajando preguntándome en que me puede ayudar. Asunto arreglado le contesto agradecido.
Una hora más tarde salgo del taller con mi nuevo aceite 10-40 directo a la ducha, para dar una pasada con agua a presion a carrocería y bajos. La rutina de siempre.
Y tras el baño, llega el momento esperado: mi 900 y yo a solas. Arranco y me sumerjo en 20 km de satisfacciones. El coche va fenomenal, suave y tira de lo lindo a pesar de que la aguja del turbo no pasa de la mitad de la zona naranja. Este problema ya lo tenía antes de darlo de baja y al parecer está causado o por una pérdida en el colector de admisión, o por el sensor de presión del turbo, que es lo más probable según me dijo el mecánico de la saab de Ourense.
Mis paseos con el 900 son tranquilos tirando a alegres, pero no me corto de ponerlo a 120km/h o más (bastante más) por esas largas y rectas pistas por las que prácticamente no me cruzo con nadie. Y una vez el motor coge la temperatura adecuada, me gusta darle algún que otro estirón hasta la zona roja del cuentarrevoluciones, por placer y creyendo que no le va a ir mal al motor que lo desagarrote un poco.
Hoy tras dos o tres buenas esprimidas decidí dar por terminado el paseo, así que antes de dirigirme de vuelta a la palleira quise enfriar un poco el motor con un par de kms tranquilos por las rectas por donde se accede a la aldea. Ida y vuelta. El km de ida bien, pero a la vuelta comenzaron los problemas. Tras detenerme y dar media vuelta comencé a notar unos tirones al acelerar, una sensación similar a cuando se te acaba la gasolina, así que lo primero que hice fue echarle el ojo a la aguja que estaba casi abajo del todo aunque no se había llegado a encender el chivato luminoso (Llegados a este punto debo reconocer que ya no recuerdo si el 900 tiene chivato luminoso...).
Después comprobé la aguja de la temperatura pero marcaba lo normal: la zona roja… jeje es broma.
Temeroso de quedarme tirado como en los viejos tiempos, llegué a punta de gas y a tirones a mi destino. Una vez allí comprobé que el ralentí era un poco irregular, aunque no se notaba en exceso, además el coche para nada hacía amago de pararse.
Sintiéndome más seguro decidí volver a la carretera para estudiar con más detenimiento los síntomas, y me di cuenta de que los tirones desaparecían a partir de las 3000rpm. A partir de ahí el coche parecía andar normal. Me atreví a hacerle una estirada más hasta la zona roja. Me fijé en que la aguja del turbo se quedaba un poco más abajo que unos minutos atrás y el tirón quizá no fuera tan contundente. Pero al bajar de las 3000rpm volvieron a aparecer los tirones así que resignado regresé a la guarida.
Y ya ta.
Bueno, como os he contado un rollo haré un resumen breve de lo acontecido:
1. Coche arranca e inicio la marcha, todo en orden.
2. En el taller cambio de aceite y refrigerante, salgo de allí y todo ok.
3. Lavado de coche y bajos con agua a presión, salgo de allí y todo ok.
4. 15 o 20 km de marcha incluidas varias estiradas sobre todo al final del trayecto, todo ok.
5. Fase de enfriamiento del motor antes de volver a guardarlo: comienzan los problemas al cabo de aprox.1 km de rodar tranquilo.
6. El coche va como a trompicones por debajo de las 3000rpm.
7. Por encima de las 3000rmp todo parece en orden, quizá algo menos de empuje.
8. Aguja de temperatura normal. Presión del turbo no pasa de 1/3 de la zona naranja al meterle caña a tope.
9. SNIF!
¿Se habrán ensuciado los inyectores por llevar el nivel de la gasolina bajo? Pero esto debería afectar a toda la gama de revoluciones ¿no?
A ver si alguien me puede dar su opinión, gracias de antemano.
Un saabludo.